Pin Pon, nuestro Peter Pan.

El 8 de febrero de 2009, a los 66 años, murió de un infarto al corazón Jorge Guerra, actor chileno que dio vida a uno de los personajes infantiles de televisión más icónicos de los 70 y comienzos de los 90. ¿Se acuerdan de Pin Pon?

Jorge Guerra nació en 1942. Muchas fuentes vinculan su infancia con la pintura a comienzos de la década de los 50 en el siglo XX pero su pasión iba por otra parte: el teatro. En lo que era el canal 9 de la Universidad de Chile y a sus 16 años, mientras se encontraba en ChileFilms, se abre una convocatoria para cursar dirección de televisión impartida por Helvio Soto. Este último comenzó a darle pequeños papeles en algunas series de la época para luego dar el paso a la conformación de papeles secuendarios en algunas películas como "Caliche Sangriento". A pesar de su bajo perfil, ya tenía preparados varios programas infantiles como "Tachito y Cototo" de 1965, siendo incluso invitado a la compañía de teatro ICTUS a participar de proyectos teatrales. Hasta que el canal de la Universidad Católica lo invita a preparar un programa de televisión enmarcado hacia los niños. Los motivos: no había un programa para pre escolares en la televisión y comenzaban a aparecer los primeros jardines infantiles; pero, no todos tenían el acceso a la televisión y la emisión de programas aún se encontraba en muchas partes en fase experimental, así que con más fé que otra cosa, apoyado por dos músicos de renombre como Valentín Trujillo y Vittorio Cintolesi, y vestido con ropas extravagantes y pintado como un payasito, nació Pin Pon.

Sin embargo, la canción no es de él.

La canción de Pin Pon es considerada como "Patrimonio Universal", sin tener un autor conocido. A Jorge Guerra le llegó la canción por medio de una educadora de párvulos quien cantaba la canción en el jardín infantil donde trabajaba. Eso si, cambió la segunda línea de la canción que decía "muy lindo y de cartón" a "con cuerpo de algodón". incluso es tan popular que hasta apareció en el doblaje latino de la primera película de "Shrek"

El proyecto televisivo tiene un exito tremendo en sintonía marcando a gran parte de una generación que tenía televisión y que por otro lado disfrutaba de la historia de este muñeco junto al Tio Valentín, el cual por más de 5 años estuvo en canal 13 hasta que Televisión Nacional se los lleva. Una oportunidad tremenda en un canal estatal con una gran difusión no se podía desaprovechar pues las canciones, en palabras del tío valentín, "creo canciones para hábitos: jugar, lavarse los dientes, guardar los juguetes". Jorge Guerra se inicia además en los efectos televisivos, utilizando los primeros efectos cromáticos de superposición de imágen, el famoso "Chroma Key". Para que se hagan una idea, algo muy parecido a lo que hacía "Chespirito" con "El Chapulín Colorado" cuando se tomaba la "pastilla de chiquitolina" y se hacía pequeño. Era tan grande el éxito que muchos pagaban a LA persona que tenía televisión una cantidad para poder ver el programa en la hora de la "once". Y si, si el rating hubiera existido la flechita hacia arriba se hubiera reventado. Y todo hubiera sido distinto de no ser por el golpe de Estado en el año 1973.

Si bien el programa duró un año más, el hecho de haber trabajado haciendo campaña y también haber participado en actos de gobierno de Salvador Allende lo tenían condicionado dentro del canal. Dentro de sus relatos menciona que muchas veces al mirar al techo donde estaba la cámara que simulaba ser el tío Valentín, había un militar apuntando hacia abajo con orden de disparar si el mensaje entregado no era el autorizado por la Junta. La cancelación del programa la menciona el mismo Trujillo en un reportaje a The Clinic donde señala que "fueron acusados de intervenir marxistamente a los niños de Chile", agregando que "no sé en qué se basan, porque si ellos revisan la letra de todas las canciones, el tema de lo que hacíamos, en lo absoluto. Era un humor transparente, limpio, hermoso, humano". Jorge Guerra termina partiendo al exilio el mismo año que terminó el programa de ser emitido en el año 1974. Después del país vecino fue a Ecuador donde retomó su personaje en el canal Ecuavisa hasta el año 1982, para luego partrir a Cuba donde se desempeñó en el teatro por más de 8 años. 

El retorno a la democracia en Chile significó la vuelta de muchos exiliados, entre ellos Jorge. La idea, nuevamente, de reflotar al personaje infantil estaba en carpeta pero esta vez ya no estaba el "Amigo Valentín" pues estaba trabajando en canal 13 junto con Iván Arenas y el "Profesor Rossa", además de desempeñarse en el programa "Sabado Gigante" con Don Francisco. Se logró una reposición del programa en Televisión Nacional en el año 1991 en el programa "Arboliris" hasta el año 1993 y quien estaba a su lado ahora era el "Amigo Pepe", interpretado por José Secall. Además pudo grabar un cassette con todas sus canciones llamado "Cantas, canto, cantemos", en donde la primera parte tenía todas sus canciones y al adverso tenía una sesión de "karaoke" donde los niños podían cantar las canciones sobre las pistas, lanzado el mismo año en que el programa deja de ser emitido en el canal. De ahí en más, a través de su mejor arma que era el teatro, con su personaje se presentó en escenarios pequeños y en otros más grandes, siguió sacando más discos ya con otras temáticas como el compañerismo, la colaboración y el cuidado del medio ambiente, participando en instancias gubernamentales a través del programa "Integra", junto con el Ministerio de Educación. También lo llevó a presentarse en Europa del norte, y también el reconocimiento de su segundo hogar televisivo en Ecuador con el reconocimiento de la Fundación Guayasamin por su trabajo en el país.

Y si bien el espíritu estaba, el avance del tiempo era implacable. Por ahí se esbozó que en una presentación el personaje recibió una tibia recepción e inclusive pifias del público en uno de los tantos teatros donde se presentaba. He buscado oficialmente cuando la fue la fecha de su retiro de los escenarios pero no aparece una información certera. No quiero en este escrito posicionar la hipótesis de que su personaje, junto con el avance de la tecnología y la entretención, ya no eran el gancho que los niños esstaban deseando. Lo que si hay certeza es que en 2004 lanzó su libro de poemas llamado "memorias del alma", firmado con su nombre -Jorge Guerra-  y en 2006 presentó una denuncia de violación de derechos de propiedad al canal Mega por la parodia hecha a su personaje con el nombre de "Popín", interpretado por el actor Pablo Zamora. En varias entrevistas hechas principalmente a Kurt Cabrera, quien secundaba a Zamora en la mayoría de sus actuaciones como "Salomón y Tutu Tutu" mencionaba que el actor que encarnó a Pin Pon los odiaba a morir y que en una de sus presentaciones la señora de Jorge Guerra les mencionó que decía que "lo mataron en vida".

Su fallecimiento fue un duro golpe principalmente para quienes buscaron reconciliarse en vida como su hija, la actríz Catalina Guerra. Hija de Gloria Münchmeyer no tenía conocimiento de su padre pues la separación de ellos ocurrió cuando tenía 3 años de edad. No tuvo una imagen paterna pues solo ella veía el personaje de Pin Pon, no a Jorge Guerra. Pudo verlo en 3 oportunidades en su vida generando un sentimiento que no podía entender; ¿como podía ser el padre de 5 generaciones de chilenos y ellos solo lo pudieron ver en 3 ocasiones? Y si bien se comportó como un buen abuelo -esto mencionado en varias entrevistas- logró una reconciliación con él para poder estar en paz. El entendimiento vino cuando en los velatorios en el Teatro Oriente se dio cuenta de la cantidad de personas que fueron a verlo, a presentar sus respetos, a llorar la pérdida de una persona que les enseñó no solo a como desenvolverse en la vida, a ser autónomos y colaborativos en casa, sino también a valerse y respetarse para poder respetar a los demás. Ahí entendió que su padre tenía otra misión: la de ser el padre para esas generaciones. 

Y es que, para esta generación, es dificil que puedan entender como un personaje, en una caja de blanco y negro en un living, pudiera darles tanta imaginación. Fuimos carentes de muchas cosas, pero algo que aprendimos fue a no dejar de soñar, a ser creativos, a descubrir, a crear. Fuimos carentes de tecnología, pero fuimos ricos por tener a Pin Pon. Gracias Don Jorge por tomar esa posta tan difícil y crear para los niños un mundo ideal en el "que valga la alegría", como bien dijo. 

KFP!