Ponerse en la situación en donde Jarvis Cocker, con casi 14 años, decidió formar con sus compañeros de colegio una banda llamada "Arabicus Pulp" es como leer lo que ocurre en todos los colegios del mundo en donde las aficiones musicales (no las de ahora, por favor) comienzan a aparecer y la ecuación es sencilla: necesitamos a uno que sepa bateria, otro que se maneje en el bajo, otro en guitarras, si hay alguien más en teclados -nunca está demás- y necesitamos de alguien que cante y haga letras. Lo que muchos no sabían era que Cocker se la sabía desde siempre: en varios reportajes señala que si bien su ánimo no era ser un gran letrista, sabía que ya desde los 8 años quería ser una estrella pop. Lo secundaba Russel Senior en guitarras, Candida Doyle en teclados, Steve Mackey en bajo, Nick Banks en bateria y percusión y Mark Webber también en guitarra para que esto se comenzara a cocinar no apurado, de manera lenta. Y vaya que lo fue, en especial con este disco, considerado en su periodo de lanzamiento, uno de los discos fundamentales de la escena británica y en donde la batalla mediática (o más de la prensa, a decir verdad) era entre Oasis y Blur, y de ahí no te saldrías por un buen tiempo.
"Different Class" es un disco que tiene varios matices: tiene canciones que perfectamente caerían en la categoría "antro oscuro con pocas luces y mucho humo de cigarrillo", como también canciones de "deja de pensar en el mañana y solo disfruta". 12 canciones bien distribuídas, con el oficio de haber tocado en varios lados desde un comienzo, con un disco "debut" como lo fue el "His'n'Hers" de 1994, donde por gracia de Santa Cecilia, la banda logró ingresar a tiempo a la vorágine de estos tiempos antes de que el tren de esto que se conocía como "BritPop" partiera, con canciones como "Babes", "Do You Remmeber The Fisrt Time" o "Razzmatazz".
Partimos con "Mis-Shapes", que va sobre quienes no encajan dentro de la sociedad y que se sienten disminuídos por ser considerados como "raros", bien pegadiza y movediza. La secunda "Pencil Skirt" en donde Cocker saca todo su istrionismo; y más que cantar, es una conversación en un cuarto de hotel barato con la luz de una ampolleta de 40 watts después de tener sexo con la amante de turno.
Y ahora se viene lo chido...
"I Spy" al igual que "Pencil..." es una canción en donde nuevamente sale todo lo actoral de Cocker. Perfectamente caería dentro de alguna película o serie con temática policial. El sonete misterioso y al borde de los gemidos hace que encaje perfectamente en esa temática.
Y otro himno de este álbum es "Disco 2000", donde el amor adolescente hacia Deborah reflota en una canción llena de recuerdos, de amores incompletos, de reencuentros, de saldar deudas pendientes; en donde un beso te podía hacer terminar en la cama, o con una cachetada.
El antagonismo se ve con "Live Bed Show". Si "Disco 2000" trataba de un amor pendiente, esta canción hecha balada trata sobre como el amor en una relación se va diluyendo, casi al grado de la resignación con ese "lalalala" sin ganas al final de la canción.
"Something Changed" quiere devolver las esperanzas perdidas. Es una canción también tipo balada pero esperanzadora, que te hace creer nuevamente en el amor, en donde quizás debas hacer un cambio para tener lo que quieres, para tener lo que anhelas. No te llama a tener certezas, solo a darte un cambio.
Sarcasmo o no, la canción que viene a continuación es "Sorted for E'n Wiss" en donde abordan como en las raves de música electrónica estaban cargadas de "E" que era el extasis, y del "Wiss", que es tambien como se le llama al "Speed" que es una variante de anfetaminas inyectables, muy común en estas fiestas en sus inicios.
"F.E.E.L.I.N.G.C.A.L.L.E.D.L.O.V.E" nos vuelve a llevar al amor, pero a preguntarnos que es en realidad. Nuevamente el istrionismo presente en medio de las letras, de un sonido bien cortante, pero que busca respuesta a saber si estamos mecanizados en el amor, o bien el amor es mecanizado.
Nos salimos un rato de ese soneto para "Underwear", también hecha balada en donde si te has sentido libre y abierto, más intenso que de costumbre, casi desnudo en lo que sientes y te muestras esperando una reacción que nunca llega, esta es tu canción. La vulnerabilidad no es algo negociable, simplemente se muestra tal y como es, y poco o nada importan las consecuencias.
¿Te gusta ir de fiestas pero sientes que esa vorágine ya no llena? "Monday Morning" es la canción que nos replantea la existencia de un lunes, después de vivir un fin de semana lleno de movidas y fiestas para nuevamente empezar la semana, y sentirte como la mierda. Pero, tranquilos, bien sabemos que ese lunes está más lejos del otro lunes, pero si has presentado ese vacío de saber que sales, la pasas bien, y después debes comenzar nuevamente a trabajar, entonces esta es una canción que encaja excelente.
Y toda fiesta tiene su final. Este disco finaliza con "Bar Italia" donde dos personas después de una noche de excesos, terminan en una cafeteria de esas que te preguntas como es que sigue parada, con muebles viejos, una cafetera más vieja que el dueño, demacrada como las personas que llegaron a ese lugar a terminar -esperamos- de una buena forma para luego irse a dormir, al menos con el estómago lleno de café y un sandwich... o con el estómago lleno de café y un paquete de "Fish'n chips"
30 años de este disco y sigue tan vigente, tan potente y tan bailable. "Different Class" es un disco de crítica, pero no solamente a lo social sino también a como nos desenvolvemos en nuestra vida cotidiana, en como nos mostramos ante el amor propio o lo que buscamos en lo que se llama amor en la otra persona, en la desilución no solo amorosa sino también en la personal de caer en la rutina, en donde también se te condena por la intensidad, por la pasión, en una sociedad vacía e individualista.
Te dejo el disco aquí, ya que Youtube se puso denso, nuevamente.
¿Que canción te gustó del disco? Déjalo en los comentarios, no seas mal@.
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