viernes, 2 de agosto de 2024

El tartamudeo de John Paul Larkin

John Paul Larkin nació el 13 de marzo de 1942 en California, Estados Unidos. No hay mucha información de sus padres y el desarrollo de su infancia pero, lo que si sabemos a ciencia cierta es que John Paul Larkin tenía un defecto, uno muy notorio: era tartamudo. En esos tiempos, el hecho de tener un defecto en el habla, en la forma de expresión, de caminar, como prefieran, estaba medianamente permitido. Y digo "medianamente" porque en esos tiempos la solución era muy simple: ponerse a pelear. Y siento que John si lo hacía pues, mal que mal, había que frenar la mala onda de alguna manera. 

Pero su refugio fue otro: la literatura y la música. Teodor Adorno y Michael Foucault fueron sus lecturas de cabecera, ambos muy concentrados en la sociedad y su dinámica, y en la música la dupla perfecta de Ella Fitzgerald y Louis Armstrong, donde el jazz y el blues -mezclado con sus clases de piano- fueron su real descanso en un árbol atribulado de interrogantes. Y de esas ramas, se descolgó un "ganchito" que era el "Scat", una suerte de improvisación vocal en donde se creaban rítmos entre palabras sin sentido; y fue mágia pues, en ese punto, encontró la tecla a su carrera; una que tardaría mucho en aparecer, y de la cual no alcanzó mucho a disfrutar. Pero eso lo veremos más adelante.

Ya con 14 años se comenzó a mover en el circuito independendiente, asistiendo a bares y pubs a mostrar su arte y también a acompañar en el piano; no, no se escandalice por la edad. Pianistas buenos que supieran enganchar con la improvisación del jazz y el blues eran pocos, y si además le agregas el Scat era una combinación perfecta para una persona que con sus problemas de tartamudez podía camuflar de manera inmediata. Lo que no se podía camuflar por nada del mundo era el entorno en el cual se desarrollaba y que, con la voragine de demanda musical en ese entonces, llegaría también como quien pide un vaso con agua, las drogas, principalmente heroina y fentanilo (si, ya era famoso este último, en especial en los años 80), y por supuesto el alcohol. En una cabeza tan rápida e inquieta como la de John, esto fue un golpe de calma y de entrega de seguridades, pero también de dependencia. Ya en los años 80, con un disco homonimo sin muchas ventas hecho en 1986, y con más de 40 años, estuvo muchas veces al borde de la muerte debido a la dependencia de las drogas y el alcohol; distinta suerte corrió su amigo Joe Farrell, musico al igual que él, quien falleciera trágicamente por la dependencia a las sustancias plásticas, siendo esta muerte la que hizo que finalmente John se diera cuenta que estaba también caminando en el borde de la corniza. 

Lo bueno es que esto, sumado a su pareja y esposa Judy McHugh, hizo que comenzara una tarea interna de desintoxicación, sumado a querer salir de ese agujero en el que estaba cayendo en un viaje sin rumbo, lo convencieron de viajar a Alemania -en específico, Berlín- a relanzar su carrera siguiendo la tónica que llevaba en Estados Unidos, pero esta vez sin drogas y alcohol. Pero su tartamudeo seguía ahi, eclipsándolo de manera interna y no dejándolo proyectar la calidad musical que este tenía. No fue sino hasta que los alemanes le escucharon cantar en un bar ">On the Sunny Side of the Street"de Frank Sinatra, ovacionándolo de tal manera que empezó a poner letras a su música, y sin abandonar su estilo "Scat", uno de sus asistentes le sugirió combinar el estilo "Scat" con el Hip Hop. Si, asi como lo lees. Combinar el Scat con el Hip Hop, ah, y el eurodance que estaba pegando fuerte en ese tiempo. ¿La idea era loca? al menos para la BMG de Hamburgo, no. ¿Y John estaría dispuesto? pues, apareció nuevamente el miedo de su tartamudeo constante; y como siempre se dice que detrás de un hombre, siempre hay una buena y comprensiva mujer, ella le dijo que hablar abiertamente de su problema podría ayudarle a él, y no solamente a él, sino que además a otras personas que presentaran la misma dificultad.Y es en esta parte de la historia donde, John Paul Larkin dejaría de ser conocido de esa manera para pasar a llamarse "Scatman John", y con ello el tan esquivo exito.

 

 La canción "Scatman (Ski ba bop ba dop bop)" partió tímidamente en los charts musicales, pasando rápidamente a posicionarse en las listas de ventas europeas, haciendo que la venta del single alcanzara los 6 millones en el mundo, y el disco "Scatman World" tuviera una venta de más de un millon de discos que, si bien es relativamente bajo, deja un precedente dentro de los denominados "one hit wonder" más que impresionante. Su exito fue tan arrollador que solamente en Japón, donde también fue de gira, vendió 1,5 millones de discos de su single más famoso y realizó dos canciones para comerciales japoneses. Incluso Ultraman, el íconico superhéroe, salió con bigotes y sombrero en una ocasión.

Con la fama por los cielos, Scatman John seguía siendo John Paul Larkin, y con 52 años, 14 discos de oro, 16 de platino y reconocimiento mundial, su centro no lo abandonó por nada del mundo; ya había tocado fondo una vez, no quería volver al mismo escenario de excesos y seguía pensando en que sus letras podrían ayudar a superar las dificultades, ver el mundo con mayor optimismo, en especial que los niños que tuvieran dificultades como la tartamudez fueran vistas como algo posible de superar, que no había nada malo en ello, que se podía convivir y superar de a poco los miedos y lo más fundamental, que siempre, pero siempre, pidieran ayuda y no se quedaran con la sensación de estar desplazados en el mundo. Fue tal su aporte a la sociedad que recibió el premio "Annie Glenn" por su servicio a la comunidad de tartamudos, siendo exaltado al salón de la fama de la Stuttering Association por su aporte a la música y al reconocimiento a nivel internacional de los trastornos del habla.

Pero, te recuerdo, que al comienzo escribí que su fama sería corta. Y no nos referimos a los mal llamados "15 minutos de fama"; en 1998, en plena creación de su tercer disco, le detectaron un cáncer al pulmón. Esto si bien le impidió presentarse en eventos masivos, seguía manteniendo contacto con sus fanáticos a través de su página web y el naciente internet. Logró cerrar su trabajo a duras penas, volviendo a California con su enfermedad más que avanzada, falleciendo un 3 de diciembre de 1999. Sus restos fueron cremados y lanzados en Malibú en el océano pacífico. 

Y sigue tan vigente como antes; solamente en Spotify su mayor exito tiene sobre 250 millones de reproducciones, sus canciones han inspirado memes y su figura en muchas partes se podría catalogar como un elemento "de culto". Lo que más importa de esto es que, a pesar de su condición del habla, bastaba solamente un catapultador de confianzas para que se pudiera atrever a hacer otro tipo de cosas, dar un giro al sentido de la vida y darse cuenta que había cosas con las que lidiar y otras en las que simplemente, a veces, no se puede hacer nada más que un poco de música para que pase la tormenta y continuar.

Una musica improvisada, como el Scat.

Gracias por todo, John.


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